El jaguar puede encontrarse en ecosistemas como bosques tropicales, bosques montanos, sabanas tropicales y hasta manglares.
Donde hay un jaguar prevalece la vida. Es una especie sombrilla que, al ser protegida, ayudará a la conservación de muchos otros animales que comparten su hábitat. Gracias a su apoyo, seguimos trabajando por la conservación y protección de este asombroso felino de la mano de las comunidades, donantes y el equipo de WWF Colombia.
¡Unámonos por la protección del jaguar, el felino más grande de América!
Nuestra relación con la naturaleza amenaza la existencia del jaguar.
Casi la mitad del “hogar” original del jaguar ha desaparecido en nuestro país.
El jaguar se encuentra amenazado debido a la tala de árboles, la minería y la agricultura. Estas degradan su hábitat, lo obligan a alimentarse de ganado y/o animales domésticos, lo que lo convierte en víctima de la caza por parte de las comunidades.
El cambio climático también está destruyendo la selva, el ecosistema con más poblaciones de jaguares y otras especies nativas. ¡Juntos podemos hacer la diferencia! Con su apoyo seguimos trabajando en la protección y conservación del felino más emblemático de nuestro continente.
¡Con los ojos puestos en la protección del jaguar!
En WWF Colombia generamos conciencia, capacitando a las comunidades que comparten territorios con el jaguar.
Así, lo que antes era temor hacia esta especie, ahora son acciones de conservación como el monitoreo comunitario, la consolidación de un corredor de miles de kilómetros por donde circula este felino y la creación de grandes oportunidades para el turismo ecológico.
¡De esta forma demostramos que el bienestar y la coexistencia entre el jaguar y el humano es posible! Cuando decide apoyar la protección del felino más grande de América, contribuye a la conservación de toda nuestra biodiversidad.
¡Otros datos que nos sorprenden del jaguar!
Mide entre 1.5 y 2.4 metros, pesa entre 45 y 120 kg y, por lo general, los machos son un 10 a 20% más grandes que las hembras, esto lo hace el felino más grande de nuestro continente.
Su anatomía es perfecta para la gran variedad de ecosistemas en los que habita; ya que, además de ser muy ágil, su mandíbula es tan poderosa que puede atravesar el caparazón de una tortuga. Sorprendente, ¿cierto?
¡Haga parte de los esfuerzos de protección y conservación de esta especie!
Juntos podemos hacemos una diferencia positiva por la biodiversidad y el futuro del planeta.