Evita la tala de árboles: Está elaborado con carbonato de calcio, un material alternativo a la celulosa vegetal, es decir que evita la tala de árboles.
Evita el consumo de agua: En su proceso de elaboración no requiere agua, evitando así el consumo de hasta 10 litros por hoja, que corresponde a la huella hídrica del papel tradicional.
Ahorra energía: Genera un ahorro de 50% de energía en su proceso de elaboración, comparado con la producción tradicional de papel. Esto a su vez contribuye a la reducción de la huella de carbono.
Tiene mayor vida útil: Es resistente al agua, a aceites y grasas y a bajas temperaturas, lo cual hará que su vida útil sea mucho mayor y se conserve en excelentes condiciones por más tiempo.
Es reciclable: Cuando termines de usarlo puedes disponerlo con tus residuos reciclables para así ser transformado en nuevos productos.
50% menos energía consumida a comparación del papel tradicional.